Otra de las tareas que realizamos en 2º de ESO durante el confinamiento consistía en imaginarnos ya mayores, dentro de mucho tiempo, y tratar de explicar a un joven de unos trece años lo que supuso para nosotros vivir la pandemia. Un ejercicio que precisa de imaginación, reflexión, empatía y creatividad. Y que además nos permite visualizar algo tan grande como es una pandemia desde el futuro, poniéndola en perspectiva en el conjunto de toda una vida, para ayudarnos a llevarla de una manera más saludable al darle su lugar en el relato de nuestras biografías.
Esto es lo que escribió Alicia García:
Recuerdo el año de la pandemia como uno de los años más raros de mi vida. Yo tenía trece años y justo en medio de la cuarentena cumplí catorce, aunque en ese momento ya se podía salir. Recuerdo cuando aún no se sabía nada de la enfermedad, solo sabíamos que estaba en China. La verdad es que todo el mundo se lo tomaba a broma al principio, pero luego empezó a acercarse a España y la gente dejó de reírse.
Creo que fueron casi tres meses los que estuvimos encerrados, sin salir. Aunque tuvimos suerte de tener aparatos electrónicos con los que podíamos comunicarnos. Para mí lo más difícil fue no ver a mis abuelos, ya que vivimos muy cerca y prácticamente los veía todos los días antes de la pandemia. También me dió mucha rabia perderme algunas cosas, como el no poder ir de intercambio a Francia, o cancelar un examen de ballet que llevábamos casi año y medio preparando, sobre todo porque era muy caro y estaba pagado. Aunque no todo fue malo. Comencé a pasar mucho tiempo con mis padres, y pude disfrutar más tiempo con mi hermano, puesto que al año siguiente se fue a la universidad.
Al final, creo que todos sacamos algo positivo de aquello, y es que si todos nos proponemos lo mismo, podemos combatirlo todo, hasta un virus mortal.
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